– En la Plaza de Salvación eterna,
en la Plaza de San Pedro en Roma,
sobre altares de culto eucarístico,
dieron adoración a Jesucristo,
aureolas circulares de cuarenta mil rosas de Pascua y primavera, amarillas y rojas, blancas y anaranjadas, rosas puras de canonización, en Domingo de Misericordia, de dos vidas santísimas: Juan XXIII y Juan Pablo II. -Las vidas de dos papas grandes, siervos de Dios y la Iglesia de Cristo, en perpetuo servicio y oración por la justicia y paz, por el amor a la verdad, sin miedo a la gran libertad universal de los hijos de Dios por la Historia finita, donde espinas de la Corona de Cristo Rey en la Cruz, son espinas de las rosas de la Pasión, la Muerte y la Resurrección, rosas divinas que también abrazan a la Virgen María, Rosa Mística, Madre de Cristo y la Iglesia Católica, Madre del Todo Tuyo en Unión Trinitaria. -Rosas puras de canonización de dos magnánimos y fidelísimos Santos Padres en obediencia y paz, caridad y justicia, sin temor a la libertad en Dios, guiados por los aromas celestiales de rosas de pureza que aureolan de Gloria a dos papas proféticos: Juan XXIII y Juan Pablo II: ¡Benditos para siempre en santidad por Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo! Diego Quiñones Estévez
(Del poemario: Liturgia de la memoria).
en la Plaza de San Pedro en Roma,
sobre altares de culto eucarístico,
dieron adoración a Jesucristo,
aureolas circulares de cuarenta mil rosas de Pascua y primavera, amarillas y rojas, blancas y anaranjadas, rosas puras de canonización, en Domingo de Misericordia, de dos vidas santísimas: Juan XXIII y Juan Pablo II. -Las vidas de dos papas grandes, siervos de Dios y la Iglesia de Cristo, en perpetuo servicio y oración por la justicia y paz, por el amor a la verdad, sin miedo a la gran libertad universal de los hijos de Dios por la Historia finita, donde espinas de la Corona de Cristo Rey en la Cruz, son espinas de las rosas de la Pasión, la Muerte y la Resurrección, rosas divinas que también abrazan a la Virgen María, Rosa Mística, Madre de Cristo y la Iglesia Católica, Madre del Todo Tuyo en Unión Trinitaria. -Rosas puras de canonización de dos magnánimos y fidelísimos Santos Padres en obediencia y paz, caridad y justicia, sin temor a la libertad en Dios, guiados por los aromas celestiales de rosas de pureza que aureolan de Gloria a dos papas proféticos: Juan XXIII y Juan Pablo II: ¡Benditos para siempre en santidad por Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo! Diego Quiñones Estévez
(Del poemario: Liturgia de la memoria).