Si alguien pensaba que por alejar a monseñor Munilla de San Sebastián iba a callarse, estaba equivocado.
José Ignacio Munilla, obispo de Orihuela-Alicante, es donostiarra de nacimiento y pastoreó la diócesis de San Sebastián durante 12 años. El prelado vasco, fiel a su estilo, ha cargado a través de sus redes sociales contra el reciente pacto entre el Gobierno social-comunista y los proetarras de Bildu.
«El hecho de que un Gobierno otorgue a los herederos políticos de una banda terrorista la capacidad de humillar a las que fueron sus víctimas, a cambio de su apoyo para mantenerse doce meses más en el poder, es simplemente inmoral», ha escrito monseñor Munilla acompañando el texto con una imagen de un atentado provocado por ETA.
El hecho de que un Gobierno otorgue a los herederos políticos de una banda terrorista la capacidad de humillar a las que fueron sus víctimas, a cambio de su apoyo para mantenerse doce meses más en el poder, es simplemente inmoral… pic.twitter.com/7J6cLJ44OK
— Jose Ignacio Munilla (@ObispoMunilla) November 24, 2022
El tuit de Munilla ha sido ampliamente respaldado por numerosos seguidores, aunque tampoco han faltado los comentarios deleznables de los proetarras criticando al obispo. Munilla sabe bien de lo que habla ya que ha tenido que lidiar prácticamente toda su vida con ese ambiente hostil.
El pacto contra el que arremete José Ignacio Munilla, es el alcanzado esta semana entre Bildu y el Gobierno para lograr el apoyo de los proetarras a los Presupuestos Generales del Estado.
Entre los «logros» de destacan crear un memorial en Vitoria por las victimas de los sucesos de 1976 y transferir a Navarra la competencia de Tráfico expulsando de esta manera a la Guardia Civil de la Comunidad Foral. Una medida que está previsto que entre en vigor el próximo 31 de marzo de 2023.