La Conferencia Episcopal denuncia que la «libertad de expresión no puede amparar el ataque a los sentimientos religiosos»
Los obispos españoles han condenado y mostrado su repulsa hacia el «blasfemo» pregón del humorista Carlos Santiago en el carnaval de Santiago de Compostela, en el que satirizó con el Apóstol y la Virgen del Pilar, y han exclamado un «¡Basta ya!».
«Nuestra solidaridad y oración con la Archidiócesis de Santiago Compostela en la repulsa y condena del blasfemo pregón del carnaval de esta ciudad. La libertad de expresión no puede amparar el ataque a los sentimientos religiosos. ¡Basta ya!», reza el mensaje publicado por el portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, en la red social Twitter.
Asimismo, en otro tuit posterior, los obispos muestran su solidaridad con la Archidiócesis de Zaragoza y hacen suyo su comunicado de condena ante las «injurias del sacrílego pregón del carnaval de Santiago de Compostela».
Antecedentes
La polémica estalló a comienzos de esta semana, cuando el diario El Correo Gallego se hizo eco de los insultos y de la indignación algunos de los asistentes: «Empezó a hablar de los huevos del Apóstol, a llamar puta a la Virgen y a decir que la Pilarica le practicaba una felación al Santo».
El alcalde populista de la ciudad, Martiño Noriega, salió el pasado jueves al paso de las críticas, y las atribuyó a una «ola represiva» del PP y la Iglesia «que intenta regular la libertad de expresión y los derechos fundamentales. Según el líder de Compostela Aberta, el pregón estuvo enmarcado dentro de la «sátira y la crítica», e igualmente «dentro de los límites del humor». En referencia a las ofensas a la virgen del Pilar, Noriega admitió que el consistorio aragonés le pidió información. «Y le hemos dicho que defiendan a la Pilarica por encima de todo», ironizó.