El borrador de conclusiones recoge que las ayudas serán exclusivamente para «la educación pública de gestión directa». El secretario general de Escuelas Católicas lamenta que el PSOE haya asumido el programa de Podemos y denuncia que esta propuesta «divide a la sociedad, introduciendo elementos ajenos al coronavirus»
Nuevo golpe a la escuela concertada. Ahora, a cuenta de los fondos extraordinarios destinados a la educación para hacer frente al COVID-19, pues PSOE y Podemos la han excluido de ayudas comprometidas en el borrador de conclusiones del grupo de trabajo de Políticas Sociales y Sistema de Cuidados de la Comisión de Reconstrucción del Congreso de los Diputados.
Una propuesta criticada PP, Ciudadanos, PNV y JxCat este mismo miércoles durante la reunión de este grupo de trabajo en la Cámara Baja, donde, además, han pedido que se revierta. Por el momento, no han tenido éxito.
Las citadas conclusiones recogen en el número 18 el incremento de los recursos públicos destinados a la educación y a las becas, pero añade que «la totalidad del incremento de la inversión irá destinado a la educación pública de gestión directa».
Además, recoge el incremento progresivo del número de puestos escolares en centros de titularidad pública para cubrir las necesidades de escolarización y la universalización de la escuela 0-3 a través de una red pública. En ningún caso, cita a la concertada ni cuenta con ella.
Para José María Alvira, se trata de «un ataque frontal, explícito y descarado por imposición de Podemos». Y añade: «Lo cual nos lleva a preguntarnos sobre quién nos gobierna en este país, si el 12 % que ha votado a Podemos o partidos democráticos».
Alvira lamenta que en vez de llegar a acuerdos que incluyan a la mayoría de los ciudadanos «para salir más unidos y más fuertes», se haya elegido «dividir a la sociedad española, introduciendo elementos que no tienen nada que ver con el coronavirus». «Están aprovechando esta crisis para imponer un programa dictatorial, que no es propio de un país democrático. Podemos quiere aprovechar la situación para imponer su programa y el PSOE consiente», añade.
Estas decisiones, continúa, nada tienen que ver con lo que desde el Ministerio de Educación le han venido manifestando en los últimos tiempos. «Nos decían que la escuela no debía temer por su supervivencia, pero con estas propuestas claro que tenemos miedo, como lo tenía el presidente del Gobierno cuando se le preguntaba sobre pactar con Podemos», explica.
En su opinión, este es un ejemplo de que caminamos «hacia un sistema dictatorial, estatalista y poco respetuoso con la pluralidad de la sociedad española» y hacia «una escuela única, al estilo de Corea del Norte, Cuba y China, porque no hay más referentes».
En la dirección contraria a Europa
Precisamente, desde Escuelas Católicas recordaban este miércoles a través de un comunicado que este borrador «avanza en la dirección contraria a la que camina Europa, donde la escuela concertada tiene una larga tradición».
«Resultaría muy interesante que nuestros políticos conocieran la situación de la escuela concertada en Europa, una escuela que no es exclusiva de España, como algunos quieren hacer creer a los ciudadanos para afianzar absolutismos y prácticas dictatoriales, y así diluir libertades», recoge.
Una nota en la que, además, se denuncia que el borrador «discrimina a las familias que eligen la enseñanza concertada, trata de hundir a todo un sector aprovechando la debilidad provocada por la pandemia y consolida el tono absolutista de Podemos frente a la pluralidad educativa que corresponde a una sociedad democrática y prevalece en toda Europa».