Lombardi tilda de «extremadamente irresponsable» la información de un diario italiano
El Quotidiano se reafirma y asegura que Francisco visitó una clínica cerca de Pisa
El Papa habría sido atendido por el profesor Takanori Fukushima, experto en tumores cerebrales y aneurismas, reportando un pronóstico según el cual no sería necesaria una cirugía
El Vaticano negó que el Papa Francisco tenga un «pequeño tumor curable» en el cerebro como publica en primera plana el diario italiano Quotidiano Nazionale en su última edición. No obstante, tras el desmentido, el director del periódico, Andrea Cangini, ratificó la versión.
«La difusión de noticias infundadas esextremadamente irresponsable y no es digna de atención», dijo el portavoz papal, padre Federico Lombardi, quien señaló que «el Papa está desarrollando su intensísima actividad como siempre».
Según el diario italiano, el pontífice tendría «una pequeña mancha oscura en el cerebro, un pequeño tumor curable» por lo que «hace unos meses fue a la clínica Barbaricina San Rossore, cerca de Pisa, donde el helicóptero del Papa fue visto aterrizar».
Detalla que «en esa ocasión, el Papa fue atendido por el profesor Takanori Fukushima, experto en tumores cerebrales y aneurismas, reportando un pronóstico según el cual no sería necesaria una cirugía».
«Usted no necesita ningún tipo de intervención porque el pequeño tumor se puede curar», le habría dicho el especialista de acuerdo a un miembro de la clínica que cita el periódico.
Tras el desmentido de Lombardi, el director de Quotidiano Nazionale ratificó la versión y dijo que «la negación es comprensible y la estábamos esperando». «Hemos mantenido durante mucho tiempo la noticia para hacer todas las comprobaciones necesarias y no tenemos la más mínima duda sobre su fundamento«, afirmó Cangini.
Agregó que en el diario se cuestionaron acerca de si debían o no publicar la noticia y que consideraron que «lo que vale para para un jefe de Estado o de gobierno también se aplica para un Papa».
En ese sentido, señaló que «la enorme responsabilidad pública de estas personalidades nos lleva a creer que el derecho a la privacidad es menos importante que el derecho del público a ser informado«.