Francisco pide «que cese toda violencia y se evite un inútil derramamiento de sangre»
Alarmado por el numero de muertos en cuatro días de manifestaciones en Nicaragua –que va desde los 10 reconocidos por el gobierno hasta los 25 que denuncia el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos– el Papa Francisco ha pedido este domingo «que cese toda violencia y se evite un inútil derramamiento de sangre». El número de heridos supera ampliamente el medio centenar.
Durante el encuentro con los fieles reunidos en la plaza de San Pedro para el rezo del Regina Coeli, el Santo Padre se ha manifestado «muy preocupado por lo que esta sucediendo estos días en Nicaragua», y a urgido a todos a «que las cuestiones abiertas se resuelvan pacíficamente y con sentido de responsabilidad».
A lo largo de cuatro días, las fuerzas antidisturbios han disparado contra manifestantes, de un modo que recuerda el asesinato de civiles en manifestaciones en Venezuela. Los estudiantes, la población y las organizaciones de empresarios protestan contra el recorte de pensiones y la subida de impuestos ordenada por el presidente Daniel Ortega para rescatar el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social.