Papa Francisco, en su catequesis sobre la dimensión jerárquica de la Iglesia afirmó que, por el servicio del ministerio episcopal el Señor se hace presente en la Iglesia, la guía y la cuida.
En la plaza del santuario de San Pedro, en Roma, ante miles de fieles y peregrinos de Italia y del mundo, el obispo de Roma explicó que Cristo edifica la Iglesia como su cuerpo, mediante los ministerios, entre los cuales se destaca el ministerio episcopal. “En la persona y el ministerio del Obispo se expresa la maternidad de la Iglesia, que nos engendra, alimenta y conforta con los sacramentos”.
El Sucesor en la Cátedra de Pedro dijo que “como sucesores de los Apóstoles, también los obispos son enviados a anunciar el Evangelio y apacentar el rebaño de Cristo. No se trata, por tanto, de un cargo honorífico, sino de un servicio que se ha de realizar siguiendo el ejemplo de Jesús, el Buen Pastor.” Y expresó que, así como Jesús llamó a los Apóstoles unidos como una familia, “también los obispos constituyen un solo colegio reunidos en torno al Papa, que es el custodio y garante de la comunión entre ellos”.
El Vicario de Cristo concluyó invitando a agradecer al Señor el servicio de los obispos en la Iglesia, acompañándolos con el afecto y la oración.